Tanto en gimnasios, como centros deportivos o pistas cubiertas, la acústica puede llegar a ser un desafío que afecta por igual a asistentes, personal y deportivas. La combinación de música en alto volumen, el ruido generado por las maquinas o incluso las actividades por equipos, puede llegar a ser molesto e incómodo para todos los presentes.

Particularmente en los gimnasios, el ruido excesivo puede dificultar la comunicación entre los entrenadores y los deportistas, menguando la calidad de las instrucciones y consejos durante el ejercicio. Por otra parte, las actividades grupales pueden llegar a ser incómodas al no poder la totalidad de los asistentes escuchar con nitidez las instrucciones del monitor.

Por otra parte, en las pistas cubiertas como pueden ser las de baloncesto, gimnasia rítmica, fútbol, este problema se agrava, ya que son espacios enormes con una arquitectura que no favorece la absorción del sonido. Esto se combina con el uso de altavoces o incluso con los canticos o ánimos proferidos desde las gradas. Esto se puede volver determinante si los jugadores no pueden escuchar con claridad las indicaciones de entrenadores y técnicos.

Con el fin de abordar esta problemática, en Polaris Sign, hemos desarrollado una amplia gana de textiles y fibras fonoabsorbentes para el tratamiento de la acústica de este tipo de espacios en particular.